domingo, agosto 23, 2009

Mike Diana


Dentro del mundo de las perversiones dibujadas, en cómic e ilustración, Mike Diana es el rey; su majestad sobrepasa los dibujos góticos y sombríos que Edward Gorey dibujara por allá a mitad del siglo XX o las más descarnadas fantasías lisérgicas y los dibujos de más contracultura del mismo Robert Crumb. No es fácil describir la obra de Mike Diana pues el carácter explicito de sus imágenes no da para medias tintas, Diana dibuja penes erectos y vaginas lubricadas en escenas de zoofilia, pederastia o incesto y sus protagonistas son personajes para muchos ajenos a estas prácticas, como Jesús o el padre de una típica y, aparentemente, feliz familia norteamericana; en otros casos los cómics de Diana redundan en lo sórdido cuando es Satanás o alguna bestia del inframundo quien comete pederastia o penetra, con su potente miembro viril, un trozo de carne, un animal o un inocente bebe. Sus obras están plagadas de sangre, vísceras, gente que llora y grita, un compendio de dolor, rabia, histeria y actitud contestataria. Todo esto, y mucho más, en un dibujo que parece de factura automática pues el pincel de Mike Diana es grueso y rápido, con una estética feísta que contribuye a la truculencia de sus historias, parece un dibujo a medio camino entre la excitación adolescente y la burla e ironía del adulto. Es, sobretodo, con este último aspecto que hay que mirar la obra de Diana, pues el autor pone en evidencia –eso sí, sin tapujos y directo al estomago– lo que él considera el declive, la decadencia y caída de la sociedad norteamericana (y por qué no de la humanidad entera). Pero Norteamérica no se ha quedado con los brazos cruzados ante la arremetida de Mike Diana, abriendo un nuevo capítulo que hace de este autor un personaje al mismo tiempo trasgresor y víctima.


La carrera de Mike Diana, antes del ataque puritano, se remonta a 1989 en su natal Florida, cuando empieza a publicar su fanzine de fotocopias llamado Boiled Angel, que lo hace con la ayuda de una máquina copiadora en la escuela donde trabaja su madre. Después de publicar seis números de su fanzine, del que hacía unos doscientos ejemplares que repartía entre sus amigos, recibió una llamada de la policía que lo consideraba sospechoso de los asesinatos de Gainsville –se trataba de un asesino en serie que había violado y matado cinco colegialas en la ciudad de Gainsville, Florida–. Sorprendido, Mike Diana tuvo que someterse a una prueba de ADN para demostrar su inocencia. Sin embargo, y gracias al seguimiento que le hizo el juez Stuart Baggish, a quien le llegaron las ediciones siete y ocho del fanzine Boiled Angel, Diana fue acusado en 1994 de obscenidad por el estado de Florida. Lo que sigue es más que obvio en un país donde la justicia funciona como un reloj: el 4 de junio de 1994 es condenado por dos cargos de obscenidad, por las ediciones siete y ocho de Boiled Angel. La sentencia le obligaba a pagar US 3.000, a pasar tres años y un día en la prisión de Angola County, a 1280 horas de trabajo para la comunidad, a asistir a un psiquiatra y a cursillos de ética periodística, que él mismo tenía que pagar y a no acercarse a menos de diez metros de cualquier menor. Como si fuera poco le prohibieron hacer dibujos, incluso para él mismo, y para comprobar que cumplía con la sentencia la policía registraba su casa de manera regular. Poco le falteó al estado de Florida para ordenar que le cortaran las manos a tan peligroso criminal, de todas formas con la sentencia la sociedad respiró tranquila y Mike Diana estuvo un buen tiempo anulado. Sin embargo, la sentencia hizo que Diana ganara popularidad hasta obtener la ayuda del CBLDF (Comic Book Legal Defense Fund) que le pagó la multa de US 3.000, y mientras en Florida quemaban sus cómics en gran parte de la unión americana se producía una Mikemanía. En la actualidad Mike Diana trabaja para varias publicaciones desde New York, aún está proscrito en el estado de la Florida y no han servido de nada los recursos de inconstitucionalidad que ha impuesto contra su sentencia.


En 1996, Mike Hunt Publishing editó una recopilación de los ocho fanzines de Boiled Angel, en el reverso de la portada del libro aparece el sabueso, es una foto de Stuart Baggish en traje de corbata –puede ser del anuario de High School–, tan inocente, tan WASP, tan niño bien de familia típica norteamericana, lo que quizás no sepa el juez es que su foto está en el libro de su acusado Mike Diana, es la venganza y estocada final que da el dibujante contra la censura, a favor de la libertad de expresión, así el libro haya sido hecho por el mismísimo Satanás

Texto extraído de: 68Revoluciones.com


Enlaces:
MikeDianaComix.com
Wikipedia.org/Mike_Diana



Escuchando... Bloody Boy (Unsane)

No hay comentarios: